Por:
Camilo José Ardila Badillo, Auxiliar de investigación II – Unidad de validación de resultados de investigación.
Para diferentes sectores económicos de Colombia, incluyendo la agroindustria de la palma de aceite, ha tomado relevancia hacer seguimiento del desempeño ambiental de sus procesos productivos debido al creciente número de restricciones de acceso a mercados nacionales e internacionales alrededor a esta temática. En este orden de ideas, las certificaciones de sostenibilidad son mecanismos que pretenden dar fe acerca del cumplimiento de normas de sostenibilidad. Ello impone la necesidad de realizar vigilancia, entre otras cosas, al desempeño ambiental de los sectores, organizaciones y procesos.
La vigilancia del desempeño ambiental de las empresas palmeras implica identificar y contabilizar los impactos ambientales generados durante las etapas de cultivo y extracción. Varias metodologías facilitan realizar la vigilancia del desempeño ambiental, las cuales presentan ventajas y desventajas; lo que suele generar variabilidad e incertidumbre con respecto a los resultados. La metodología más utilizada es el Análisis de Ciclo de Vida (ACV) que cuenta con el respaldo de la Organización Internacional de Estandarización (ISO, por sus siglas en inglés). Específicamente, se trata de la norma técnica ISO 14044 del 2006, la cual de manera muy resumida sugiere las siguientes etapas:
Definición de meta y alcance: en la cual se espera describir el objetivo del estudio y el sistema a evaluar. Para el caso particular del sector palmero colombiano, se trata de la definición de las etapas de la cadena productiva que serán evaluadas (Ver Figura 1).
Inventario de ciclo de vida: consiste en el proceso de recopilación de información de las cantidades de elementos que entran y salen del proceso productivo. Un claro ejemplo de una entrada en el cultivo de la palma de aceite son los fertilizantes, el combustible, la energía, el agua de riego y agroquímicos, mientras que algunos ejemplos de salidas son los racimos de fruta fresca, los gases de combustión de equipos, tusa o racimos de fruta vacíos, etcétera.
Evaluación de impactos ambientales: en esta etapa se realiza la determinación de los impactos ambientales, considerando la información recopilada en la etapa anterior. Este proceso suele realizarse por medio de programas de software especializados que facilitan la visualización de la relación entre los procesos productivos y los impactos ambientales asociados.
Interpretación del ACV: durante esta etapa se determinan los procesos que generan el mayor impacto ambiental y se plantean oportunidades de mejora.
Los resultados de un ACV son de interés para los diferentes stakeholders de la agroindustria de la palma de aceite, ya que estos son un insumo importante en el proceso de toma de algunas decisiones como:
- Selección o modificación de tecnologías, equipos o métodos utilizados en el proceso productivo.
- Identificación de oportunidades para el uso eficiente y sostenible de los recursos naturales.
- Identificación y priorización de oportunidades de optimización.
- Indicadores que permiten la referenciación competitiva en temas ambientales.
