Por:
Daniel Felipe Alvarado Ospino, Auxiliar de Investigación II
Nolver Atanacio Arias Arias, Investigador Titular, Coordinador del Programa de Agronomía.
En el caso de la Zona Norte palmera de Colombia, los cultivos se encuentran establecidos en suelos que en su mayoría tienen desbalance de bases ocasionado por los altos contenidos de calcio, ya que su principal efecto es disminuir la disponibilidad de elementos como el magnesio (Mg) y el potasio (K) en el suelo, los cuales son de gran importancia para el desarrollo y productividad del cultivo.
Como un método de nivelación de las deficiencias de potasio (Figura 1) que pueden presentar las plantas a estas condiciones y como aporte dentro de los programas de fertilización, los palmicultores han encontrado en la aplicación edáfica del cloruro de potasio una fuente económica y de rápida disponibilidad para las plantas; sin embargo, esta fuente contiene un alto contenido de cloro (46–46,5%), el cual solo es requerido por la planta en cantidades mínimas, y en su mayoría se queda en el suelo formando sales.
En el caso del cultivo de palma y en especial en la producción de aceite, el cloro puede ser precursor de ésteres como el MCPD (monocloropropanodiol), los cuales se forman durante los procesos de refinación del aceite al estar sometido a altas temperaturas y son considerados como contaminantes de productos alimenticios en niveles superiores a 2,5 mg/kg. En este sentido se están evaluando otras fuentes de potasio como métodos reposición de este elemento al suelo y que además por ser fuentes sulfatadas (Figura 2), ayuden en el mejoramiento de las condiciones del mismo a través de la formación de sulfatos de calcio que permitan disminuir la saturación del calcio en el suelo.
De acuerdo con estudios adelantados en el departamento del Cesar, se ha encontrado que las palmas que son fertilizadas con KCl acumulan hasta 44,43% más de cloro en el racimo en comparación con los provenientes de palmas fertilizadas con otras fuentes que no contienen cloro, tales como el sulfato de potasio y fertilizantes compuestos cuya fuente de potasio es en base sulfato.
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Cenipalma sigue trabajando en medir las concentraciones de cloro en el aceite de plantas de beneficio evaluadas con diferentes fuentes de potasio, con el fin de establecer los requisitos mínimos que se necesitan para no sobrepasar los límites establecidos por los importadores de aceite; y también en la implementación de medidas de mitigación al momento de la recolección de los racimos en el campo.
