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Artículo del Boletín N° 41 de Salud & Nutrición.
En respuesta a la creciente demanda de opciones nutritivas y con menor impacto medioambiental, el sector de alimentos ha aumentado la oferta de alimentos envasados y empacados con mejores perfiles nutricionales y más sostenibles. Y el etiquetado nutricional es una de las herramientas disponibles para identificar las opciones de preferencia.
El consumo excesivo de los nutrientes de interés en salud pública (azúcares, grasas y sodio) se asocia con las enfermedades no transmisibles de mayor prevalencia en el mundo: enfermedad isquémica del corazón (primera causa de muerte en Colombia en 2022), accidente cerebrovascular, hipertensión arterial, diabetes, sobrepeso u obesidad y cáncer. La respuesta de organizaciones multilaterales y algunos gobiernos ha sido proponer y adoptar diferentes sistemas de etiquetado nutricional como el medio para ayudar al consumidor a tomar decisiones informadas sobre alimentos que pueden tener efectos en su salud, ya que presenta datos sobre tamaños de porción, ingredientes y aporte de nutrientes de un alimento.
Este tipo de etiquetado impacta tanto a los consumidores como a los productores de alimentos pues, por una parte, pretende proteger al consumidor y, por otra, ha promovido la reformulación de alimentos para lograr un mejor perfil nutricional y reducir su contenido de nutrientes críticos en salud pública como grasa saturada, sodio y azúcar.
Marco normativo del etiquetado nutricional
Según la Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés), en la Segunda Conferencia Internacional sobre Nutrición realizada en 2014, los gobiernos acordaron empoderar a los consumidores al ofrecerles información objetiva sobre salud y nutrición para adoptar y mantener prácticas alimentarias saludables. Y a nivel local, el artículo 5º de la Ley estatutaria 1751 de 2015 del derecho fundamental a la salud, establece como obligación del estado colombiano formular y adoptar políticas que propendan por la promoción de la salud, prevención y atención de la enfermedad y rehabilitación de sus secuelas, mediante acciones colectivas e individuales. Dichas políticas incluyen la regulación del sistema de etiquetado nutricional de los alimentos.
En Colombia se cuenta con la Ley 2120 de 2021 cuyo objeto es la “adopción de medidas efectivas para promover entornos alimentarios saludables y prevenir la aparición de enfermedades no trasmisibles, mediante el acceso a información clara, veraz, oportuna, visible, idónea y suficiente sobre componentes de alimentos con el propósito de fomentar hábitos saludables”. Además, la Resolución 810 de 2021 establece el reglamento técnico sobre los requisitos de etiquetado nutricional y frontal que deben cumplir los alimentos envasados o empacados para consumo humano. Dando alcance a la Ley 2120, y para modificar algunos artículos de la Resolución 810, en diciembre de 2022 se suscribió la Resolución 2492 que incluye los requisitos vigentes para el etiquetado nutricional, definido en esta resolución como “toda descripción contenida en el rótulo o etiqueta de un alimento destinada a informar al consumidor sobre el contenido de nutrientes, propiedades nutricionales y propiedades de salud de un alimento”.
Para sacar el mayor provecho de esta herramienta de comunicación entre fabricantes y consumidores, es necesario realizar campañas de sensibilización y educación para ayudar a los consumidores a comprender y utilizar la información que ofrece el etiquetado nutricional. Un buen ejemplo es la campaña educativa “La nueva etiqueta de información nutricional: ¿En qué le beneficia?” desarrollada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés), para ayudar a consumidores, profesionales de la salud y educadores a identificar los cambios realizados en la etiqueta nutricional y aprender a interpretarla. Esta campaña educativa incluye su divulgación mediante diferentes canales como redes sociales, publicidad, videos y materiales educativos descargables y amigables para el consumidor.
Algunos datos sobre la información presente en el etiquetado nutricional vigente en Colombia
- La información nutricional incluye el tamaño de una porción y el número de porciones por envase.
- Los datos nutricionales deben aparecer en el siguiente orden: calorías, grasa total, grasa saturada, grasa trans, carbohidratos, fibra dietaria, azúcares totales, azúcares añadidos, proteína y sodio.
- Los títulos de calorías, grasa saturada, grasas trans, azúcares añadidos y sodio deben aparecer en negrilla y tener un tamaño de letra 1.3 veces más grande que los títulos de los demás nutrientes.
- El contenido de grasas, carbohidratos y proteínas se mide en gramos (g), el de sodio en miligramos (mg).
- La información sobre vitaminas y minerales, excepto sodio y potasio, debe separarse de la información de los demás nutrientes.
- Si se declara potasio, su información debe aparecer inmediatamente debajo de la de sodio.
En términos prácticos, se trata de usar el etiquetado nutricional para elegir los alimentos empacados o envasados que sean ricos en los nutrientes que se desea consumir y bajos en aquellos que desea limitar.
QUÉ PONER EN EL PLATO PARA LOGRAR UNA ALIMENTACIÓN BALANCEADA
Artículo del Boletín N° 42 de Salud y Nutrición
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